Por ejemplo, el matcha de Chiki Tea se envasa en la fuente en envases especialmente diseñados embalaje de caja de lata hermética y enjuagado con nitrógeno para eliminar la oxidación del oxígeno y mantener el té fresco hasta que se abra. Además, se fija otra barrera a la tapa para absorber el oxígeno después de la apertura. Abra suavemente el bote de lata de té de metal sobre un fregadero, ya que el matcha "humeará" y dejará un pequeño residuo flotando en el aire. Una vez que se abre el matcha, es hora de comenzar a batirlo a diario porque ¡el matcha no envejece con gracia! No se sienta tentado a guardarlo todo el tiempo que pueda debido al costo. Los mejores sabores y aromas estarán dentro de las primeras tres semanas si se almacena correctamente para que el aire se mantenga al mínimo absoluto. Matcha debe mantenerse en el refrigerador, de manera óptima en el recipiente hermético, se ha empaquetado y utilizado dentro de las 3 semanas para obtener el sabor, el aroma y el color más frescos. Para usar, saque el matcha del refrigerador y limpie cualquier condensación. Tenga sus herramientas afuera y listas, su tazón de preparación y chasen calientes, y luego abra la bote de lata de metal matcha, saque la cantidad deseada y cierre rápidamente la tapa. El oxígeno y la humedad son los principales factores que deterioran todo el té japonés, pero especialmente el matcha, debido al tamaño de las partículas. El matcha sin abrir se puede almacenar en el congelador durante un año o más, pero una vez abierto, guárdelo en el refrigerador y consúmalo rápidamente. Es posible prolongar la frescura del matcha abierto colocándolo en el congelador; sin embargo, debido a que la condensación es un asesino de matcha, el recipiente debe limpiarse y dejarse unos minutos para detener la acumulación de condensación antes de abrirlo. Esto es ideal si su bote de 100 g tarda más de un mes en consumirse.